Desde ahora rival a vencer es Enrique Alfaro
Por si quedaba duda, después del debate del pasado 10 de junio de los contendientes a la gubernatura de Jalisco, el candidato a vencer no es el priista Aristóteles Sandoval, sino Enrique Alfaro Ramírez, de Movimiento Ciudadano. Lo digo por las siguientes razones:
1.- Fue el candidato más mencionado, en el debate “marcó la pauta” del resto. A pesar de que se esperaba que el más atacado fuera Aristóteles Sandoval, éste lució como candidato retador en lugar de candidato a vencer. El candidato del PAN, Fernando Guzman,intentó endilgarle algunas acusaciones, las cuales lejos de exhibir a Enrique Alfaro, demostraron que pese a que sostiene lo contrario, está desesperado por su caída en las preferencias electorales.
2.- Resultó ser el ganador del debate, pese a que el ejercicio de medición de Reforma (abierto a suscriptores) marcó como favorito a Aristóteles Sandoval, el ejercicio más creíble fue el de varios expertos y líderes de opinión convocados por el mismo grupo Reforma, quienes calificaron con 8.1 de calificación a Enrique Alfaro, mientras Aristóteles Sandoval obtuvo sólo un 5.4 de calificación. Y digo que la de expertos fue la más significativa porque se descubrió que el PRI, utilizó su llamado “Troll Center” para distorsionar las preferencias del debate abierto a suscriptores de Reforma. Detalles de las calificaciones del debate pueden ser revisados enhttp://gruporeforma.mural.com/graficoanimado/comunidad/debate_jalisco2012/segundo_debate.pdf.
3.- Enrique Alfaro lució aun más seguro y contundente que en el primer debate del 1º de mayo, demostrando que tiene madera de orador y que tiene la altura que el cargo de Gobernador requiere.
4.- A diferencia del primer debate, logró sacar de sus casillas a Aristóteles Sandoval, quien de forma inexplicable acusó a Enrique Alfaro de haber tenido negociaciones y tratos con Raúl Padilla y el “Güero Barba”, quienes son conocidos aliados actuales de Aristóteles e incluso dos miembros de la familia del “Güero Barba” son candidatos del PRI, uno a la alcaldía de Tlaquepaque y otro a diputado Federal (Alfredo y Marco, respectivamente). Este ataque por parte de Aristóteles sólo reflejó frustración, pues acusa a Alfaro de haber estado aliado con quienes hoy son claramente cercanos al priista. Estas alianzas evidentemente no son del todo populares, ya que Raúl Padilla es un villano favorito de la opinión pública y los Barba son un ejemplo de dinastía sindicalista que acapara poder. Que Aristóteles perdiera la cabeza y en un debate abriera “friendly fire” -fuego amigo- contra los propios, causó cuando menos incomodidad de los propios priistas y en lugar de perjudicar a Enrique Alfaro, pudiera costarle apoyo al mismo Aristóteles.
5.- En el debate se logró polarizar la elección. Como un efecto colateral de que incluso Fernando Guzmán y Fernando Garza atacarán al Enrique Alfaro, el ejercicio le acarreó al candidato de Movimiento Ciudadano el rédito de que se transmitiera un mensaje claro: que Fernando Guzmán y el PAN están fuera de la contienda, que la elección es entre dos, Aristóteles Sandoval o Enrique Alfaro, y que el voto panista se percibe mucho más cercano a Movimiento Ciudadano que a su más acérrimo rival histórico. Así, sin quererlo, Guzman le cedió el voto útil panista a Alfaro.
A pesar de la poca difusión y la total falta de sentido común de “encimar” un debate local en la misma fecha que un debate presidencial (sobre todo que ambos fueron en Guadalajara), el debate dio para hablar de Enrique Alfaro, y hablar bien, lo que no puede más que seguir apuntalando su vertiginosa escalada en las preferencias electorales, justo en la recta final de las campañas.
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Salvador Gallo Korkowski @sgallok
Salvador Gallo Korkowski @sgallok